Siento su ausencia; le busco entre los cajones de la alcoba; una pista, algún detalle, cualquier cosa que me traiga su recuerdo; una foto, un poema, su sonrisa dibujada en un papel de colores….., y consulto su panel de avisos, aquel colgado de la pared celeste de su habitación, buscando no sé qué; tal vez una frase, un te quiero, un te extraño, algo que olvidó decirme antes de partir, algún sentimiento….., tantos recuerdos llegan a mi……, pasado inocente……,mi hijo está ausente…..
Y necesito que el tiempo vuele, tener su presencia pronto, muy pronto; mi alma llora su ausencia. Recuerdos de su infancia me embriagan de ternura; piel blanca, delicada, con la pureza de la inocencia prendida en su mirada…… y me despierto y la realidad me recuerda que el tiempo pasa inexorablemente, y nos deja huella y los momentos de ternura de una madre se quedan allí, en un pasado feliz, en un pasado lejano. Añoro aquellos abrazos sinceros, su dependencia infantil, corazón con corazón, mi pequeño……, mi alma cómplice, mi apoyo constante, mi confidente…..mi hijo está ausente…..
Vuela viento, vuela sin freno hasta el oriente más lejano, allá donde la arena es polvo, donde las mañanas abrasan y las noches son de abrigo, donde hasta la miseria se apiada de las almas que moran en el adobe, donde la corrupción es lenguaje y el miedo una doctrina; llévale mi mensaje de apoyo, de esperanza; dile que le espero, dile que deseamos su regreso, seguro, sereno, con el orgullo de la valentía en su pecho y la esperanza de todo un mañana por delante. Dile viento, dile……que le quiero……